El informe de la presidenta Claudia Sheinbaum en el Malecón Tajamar tuvo un eco inesperado. Mientras la mandataria hablaba de avances en su primer año de gobierno, entre el público se alzaron pancartas y gritos de familiares de Salomón Alfonso Muñoz, conocido como “Maffer”, quien lleva más de diez meses en prisión preventiva, acusado de ser autor intelectual de un homicidio que, aseguran, no cometió.
La protesta fue encabezada por Yessenia del Rosario Hernández Cruz, esposa de “Maffer”, quien entregó una carta dirigida a la presidenta solicitando su intervención directa en el caso. “La ineptitud y abusivo proceder de la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo, ayudados por el Poder Judicial, lo mantienen privado de la libertad por más de 10 meses sin pruebas y con un proceso injusto e irregular”, expuso en el documento.
De acuerdo con la misiva, Muñoz fue detenido el 4 de noviembre de 2024 por el presunto delito de homicidio contra un trabajador del sindicato de taxistas “Andrés Quintana Roo”. Sin embargo, la familia señala que en todo el proceso jurídico han prevalecido irregularidades, incluyendo audiencias diferidas y canceladas por parte de la jueza de control, Teresa Isabel López Aguilar. Aseguran que hasta la fecha, la Fiscalía no ha presentado evidencia contundente en su contra.
Para los familiares, este encarcelamiento tiene un trasfondo político. Todo el proceso da a pensar que se trate de un preso político y no se está aplicando un procedimiento justo y transparente.
“Maffer” es un personaje conocido en el gremio taxista de Cancún, con una trayectoria de más de 34 años. Inició como operador y ascendió a cargos administrativos dentro del sindicato. Su esposa lo describe como “un hombre honesto, trabajador y dedicado a su familia”, incapaz de causar daño a alguien.
El llamado de Yessenia fue claro: que la presidenta observe personalmente el expediente para comprobar la inocencia de su esposo. “Le pedimos justicia y libertad inmediata para Maffer”, insiste, con la esperanza de que la máxima autoridad del país pueda intervenir donde las instancias estatales, encabezadas por la gobernadora Mara Lezama, han fallado.
La protesta se sumó al ambiente político del evento, recordando que detrás de los discursos oficiales persisten reclamos ciudadanos que exigen no quedar atrapados entre la burocracia y la indiferencia judicial.