El estado de salud del Papa Francisco ha mostrado signos de mejoría este martes 4 de marzo, luego de haber sufrido dos crisis respiratorias en la víspera. De acuerdo con el Vaticano, el pontífice de 88 años ya no requiere ventilación mecánica para respirar y ha sido trasladado a un tratamiento con oxígeno administrado a través de una cánula nasal.
El Santo Padre había sido sometido a ventilación no invasiva el lunes 3 de marzo, tras experimentar episodios de "insuficiencia respiratoria aguda". Estos incidentes obligaron a los médicos a realizarle dos broncoscopias, procedimientos en los que se extrajeron "abundantes" secreciones de sus pulmones, reduciendo la obstrucción de sus vías respiratorias.
Pronóstico reservado y seguimiento médico constante
A pesar de la mejoría, el pronóstico del Papa sigue siendo "reservado" y su equipo médico mantiene estricta vigilancia sobre su evolución. La Santa Sede informó que Francisco "durmió bien durante toda la noche", lo que ha sido interpretado como una señal alentadora en su recuperación. Sin embargo, los especialistas advierten que su estado sigue siendo delicado, dado el antecedente de una neumonía bilateral detectada el 18 de febrero, lo que lo mantiene hospitalizado en el hospital Gemelli de Roma desde hace más de dos semanas.
El Dr. John Coleman, experto en cuidados pulmonares críticos de Northwestern Medicine en Chicago, explicó que el hecho de que los médicos hayan tenido que extraer manualmente las secreciones pulmonares es un signo preocupante, pues indica que el Papa no tiene suficiente fuerza para expulsarlas por sí mismo. "Está dando pequeños pasos hacia adelante y luego hacia atrás", comentó Coleman.
Francisco, en su ausencia pública más prolongada desde 2013
Desde su ingreso en el hospital, Francisco no ha aparecido en público, marcando su ausencia más larga desde que asumió el papado en marzo de 2013. Aunque no se ha dado una fecha exacta para su regreso a las actividades oficiales, el Vaticano ha dejado en claro que su recuperación será monitoreada con cautela y sin prisas.
¿Qué sigue para el Papa Francisco?
El Papa ha estado recibiendo fisioterapia respiratoria para mejorar su función pulmonar y evitar el uso de ventilación mecánica invasiva. No obstante, los expertos advierten que su evolución dependerá de cómo logre eliminar las secreciones acumuladas en sus pulmones sin necesidad de intervenciones médicas repetidas.
Por ahora, la atención del mundo sigue puesta en la salud del líder de la Iglesia Católica, mientras el Vaticano mantiene bajo reserva la información sobre cuánto tiempo más permanecerá hospitalizado y cuál será su agenda en los próximos días.